Por: Ivonne Pérez Ronquillo
Al fin estamos en la tan esperada Temporada de Premios 2021, que pese a todos los inconvenientes que ha atravesado por la pandemia siguen llevándose a cabo, por lo general, en modalidades híbridas, tal como sucedió el 28 de febrero en los Golden Globe.

Evidentemente, el espectáculo dio mucho de qué hablar, empezando por las graves críticas que sufrió la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), debido a la evidente falta de miembros de color en esta.
Y en relación al tema, una de las películas que más sonaron posterior a los premios fue Ma Rainey’s Black Bottom, o La madre del Blues, para Latinoamérica, y no precisamente porque tuviera un gran éxito en cuestión de premiaciones, sino porque gracias a esta presenciamos uno de los momentos más emotivos de la noche.

Chadwick Boseman fue nominado y premiado por la HFPA de manera póstuma. El actor, quien falleció en agosto del año pasado debido a cáncer de colon, sigue protagonizando las noticias sobre el mundo del entretenimiento. Y es que cómo no lo iba a hacer si su última interpretación de su carrera fue extraordinaria.
Pese al toque teatral con el que cuenta la cinta, la historia se desarrolla de una manera impresionante gracias a las interpretaciones, tanto de Boseman como de Viola Davis, su coprotagonista.
Esta película fue estrenada en diciembre del año pasado en la plataforma de Netflix; está basada en la obra de teatro de 1982 de August Wilson, donde pone en escena a la cantante Ma Rainey en medio de un embrollo al intentar grabar un disco en la década de 1920.
Pese a que toda la historia se desarrolla en un mismo lugar, trata temas sumamente importantes y delicados: relaciones homosexuales, violación, racismo, infidelidad, robo de derechos de autor, clasismo e, inclusive, un asesinato.
Boseman interpreta a Levee Green, un trompetista que pese a haber tenido una infancia difícil debido al racismo al que estuvieron expuestos sus padres, sigue buscando superarse e incluso sueña con tener su propia banda. Sin embargo, las condiciones sociales y mentales propias dificultan su llegada al éxito.

El premio que ganó le fue otorgado a Taylor Simone Ledward, su viuda, y lo recibió entre lágrimas, dando el discurso más emotivo de la noche:
«Diría algo hermoso, algo inspirador. Algo que amplificaría esa pequeña voz dentro de todos nosotros que nos dice ‘tú puedes’, que te anima a seguir adelante, que te llama a regresar a lo que estás destinado a hacer en ese momento en la historia».
Se rumora que es casi seguro que Boseman también obtenga el galardón póstumo en los Oscares, sin embargo, por el momento no nos queda más que esperar al 25 de abril para averiguarlo.